sábado, 13 de junio de 2009

Intercambiador cultural: el papel del comunicador indígena

*Periodismo de denuncia e investigación, característica del comunicador indígena: Del Val
*Crear cuadros que el Estado no ha “podido” hacer: UNAM

Remedios Pastén Rosales

México, (Aunam). En el marco del II Seminario de Radio y Comunicación Indígena que se celebra en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS), José del Val Blanco, director del Programa México Nación Multicultural (PUMC) habló sobre el papel del comunicador indígena.

Ante un auditorio lleno, Del Val dijo que la diferencia entre el comunicador indígena y no indígena, es que “el primero opera de entrada y salida con un medio equivalente y el comunicador indígena no, pues éste opera desde su comunidad hacia el exterior”, genera conocimiento e información. Por tanto, “su papel es la de un intercambiador cultural clave”.

En cuanto a las características que deben tener los profesionales indígenas de la comunicación, señaló que “es importante que cuenten con una capacitación que les permita ejercer un periodismo de denuncia e investigación en su comunidad, no folklórico, pues ellos son agentes de información”. Mencionó que deben “traer a la comunidad al mundo exterior y llevar el exterior a la comunidad”.

El comunicador indígena “debe buscar un modelo de comunicación que permita a sus comunidades apropiarse del mundo”, lograr el reconocimiento de sus comunidades en su esencia, variar la forma de resistencia y denuncia, mediante un el ejercicio intelectual único, a fin de recuperar lo que les pertenece.

En su papel de comunicador, precisó, el indígena debe asumir en este momento la capacidad de hacer ver al resto de la sociedad el derecho a articularse con sus recursos. Su misión “es de gran responsabilidad, coincidencia de intereses, para conocer sus territorios y apropiarse de sus cosas”.

Explicó que, en su papel de intercambiadores, los comunicadores deben hacer saber toda esta problemática a los mexicanos, a fin de crear una ofensiva ante los despojos de sus territorios como en el caso de Atenco, La Parota, El Plan Puebla Panamá, entre otros, pues no es tanto una oposición al capitalismo, sino que una asociación negociadora, ante un despojo descomunal.

Ante estos retos, el director del PUMC destacó que el elemento esencial del seminario es coadyuvar en la formación de comunicadores con elementos que les permitan generar estrategias de penetración hacia dentro y fuera de sus comunidades. Asimismo, dijo que las radios deben asumir un papel importante ante el despojo del capitalismo globalizado, destructor, por lo que se necesita de comunicadores indígenas formados.

México, Nación Multicultural fue la conferencia dictada por el etnólogo José del Val, quien señaló que el Programa es el resultado de la preocupación del anterior rector por vincular a la Universidad con los pueblos indígenas, debido a que entre 1930-2003, sólo se produjeron 500 investigaciones en bibliotecas que hacían referencia de manera directa, indirecta o marginal, a las cuestiones indígenas.

Agregó que, incluso, la Facultad de Derecho de la UNAM, con quinientos años de historia, no cuenta con una materia de Derecho Indígena. El tema se ha abordado de manera marginal en maestrías y doctorados, fue después del levantamiento zapatista cuando se observó desconexión de la universidad y los pueblos indígenas, aunque los universitarios estaban muy interesados en el movimiento.

A partir de ello se conformó el PUMC, un programa con características especiales, primero a partir de un proceso de formación universitaria transversal en 14 diferentes universidades, hasta hoy exitoso, donde la problemática indígena se dimensiona en todas las áreas y ciencias que imparte la universidad.

Un segundo plano es ubicar la problemática indígena en las diferentes licenciaturas, a fin de formar un criterio e involucrar en los pueblos indígenas a la comunidad, mediante la incidencia en la formación básica de los estudiantes. Un tercer punto ha sido el diagnóstico y análisis de la realidad y desarrollo de los pueblos indígenas en los últimos 25 años.

Este desarrollo permitió las organizaciones no gubernamentales llevaran el tema de los pueblos indígenas a Naciones Unidas, convirtiéndolo en un asunto de orden internacional, hasta la reciente declaración de sus derechos en septiembre de 2007, lo que ha traído la transformación de las diversas legislaciones de América Latina, y la constitución de naciones multiculturales.

En el caso de México las reformas iniciaron entre 1989-1990 con el artículo 4 Constitucional, le siguieron las reformas a raíz del levantamiento zapatista, pero aún hoy estas resultan insuficientes, pues en realidad no se ha sabido entender qué quieren los pueblos indígenas, por lo que este es el tema de mayor relevancia.

Ante estos desafíos, el Programa México Nación Multicultural se vincula de manera orgánica con los pueblos indígenas, tanto de México como del continente, con el objeto de interculturalizar a la UNAM, donde cada facultad asuma esa interculturalidad y empiecen a incluir materias sobre esta problemática, creando los cuadros que el Estado no ha “podido” hacer.

El director dijo que el PUMC hace lo suyo a través de un programa de becas (300 que se incrementarán a 500) para pueblos indígenas, en la idea de formar cuadros que puedan defender sus proyectos y territorios, pues aún cuando existen diferentes ordenamientos jurídicos, esta resulta insuficiente.

Finalmente señaló que el mayor problema de los pueblos indígenas es “su despojo, su no acceso al conjunto de derechos que tienen, la precaria posesión a sus territorios, la reconstrucción de especificidad que no ha sido concretada, pues no existen pueblos indígenas como sujetos políticos, hay mucho discurso y legislación pero no se les resuelve, pues ante la globalización no tienen instrumentos de defensa y resistencia”.