jueves, 25 de abril de 2013

Eugenio Bermejillo en el Tercer Seminario de Radio y Comunicación Indígena

Para hablar sobre la red de comunicación Boca de Polen.- Lo que hacemos es acompañar, asesorar y también producir para otras instancias de comunicación indígena, en 2001 hubo la oportunidad de generar esta red, estaba en aquel tiempo, si ustedes se acuerdan, una marcha muy importante de Chiapas a la ciudad de México para promover que la iniciativa de la COCOPA se convirtiera en parte de la Constitución, había una efervescencia increíble en torno a la cuestión indígena creo que como ahora, aunque de un modo diferente. En el centro de la polémica nacional, en el centro de la arena política de los mexicanos estaba el tema indígena y estaba el tema de su comunicación y de una manera muy diferente, porque en 2001 había un impulso fuerte, donde los indígenas pasaron de estar en el closet de la política mexicana, a estar protagónicamente en el escenario político. Por otra parte, no existían las radios indígenas, había pequeños intentos, estaban las dos radios tradicionales indígenas, radios surgidas en los años 50 y 60, que eran radio Teocelo y Radio Huayacocotla, ésta última todavía se llama la radio de los campesinos, estas radios estaban impulsadas por movimientos de inspiración cristiana que veían en la radio más que un medio de comunicación, un medio de educación y esa fue una generación no sólo en México, en toda América Latina que impulsó a las radios comunitarias.
Pero no había radios comunitarias, había por supuesto las radios indigenistas que en muchas cuestiones suplía lo que en otros países hacían las radios comunitarias indígenas, creo que estas radios tenían muchos rasgos importantes de las radios comunitarias, otros no y había y yo creo que hay en muchas de estas radios una idea de que son la cadena de transmisión de los mensajes y de la información que se genera en el estado y en los pueblos indígenas, en su mayoría no son alfabetizados o son analfabetas funcionales, la radio será la vía para hacer llegar estos mensajes del gobierno, ese era el panorama, que se asemeja a la actualidad donde las radios son un elemento del prestigio comunitario.
Otro elemento de comparación de lo que estaba pasando en 2001 y lo que sucede ahora es respecto al periodismo ¿Qué era el periodismo civil o que era el periodismo en 2001? son dos cosas muy diferentes, yo creo que en 2001 a principios de este siglo, el periodismo todavía era ejercido por una casta, era ejercido por un pequeño grupo que tenía amarres más fuertes incluso que los sectores empresariales o que la clase política y cerraba filas en torno a intereses gremiales y que los periodistas era gente que había pasado por todos los candados necesarios para entrar a estos medios donde se ejercía el periodismo de manera gremial.
Muchos dicen que el periodismo civil, no nació pero por lo menos se dio a conocer, durante las manifestaciones contra la organización del comercio mundial en Seattle, pero ya llevaba vuelo desde antes y lo que a mí me parece increíble es que el periodismo civil, el periodismo hecho por no periodistas, gente que no ha estudiado para eso, gente que no tiene la plataforma de grandes medios, ese periodismo que está ganando incluso terrenos que son como los más preciados del periodismo, el periodismo político que se realiza durante las campañas políticas está captado también por las redes sociales y por este periodismo, que no es periodismo formal ni profesional, es decir el periodismo civil está desplazando al periodismo formal de una manera muy importante.
Por otra parte, es importante mencionar que las autenticas radios comunitarias están muy fuertes, no tienen ley, se mantienen con pocos recursos, tienen una calidad de personal porque muchas de ellas dependen del trabajo voluntario, tienen personal poco capacitado, aún con todo eso están muy fuertes, están creciendo y hay que revalorar una estrategia de victimizar a las radios comunitarias de hacerlas como si fueran el pequeño David y Goliat que llega y roba su equipo y mata a sus reporteras, yo creo que gran parte que han tenido las radios y las dificultades que tienen las radios es porque siempre que hay una radio comunitaria, lógicamente son radios que están subidas en un movimiento civil, las radios comunitarias no se dan por sí, una radio comunitaria no tiene sentido si no hay un movimiento social que las impulse.
Pero este movimiento de avanzar siempre tiene lastres, siempre tienen enemigos y no hemos podido, yo creo que ese es el gran reto de muchos movimientos sociales y en particular del movimiento indígena, establecer relaciones más de colaboración en el peor de los casos de neutralización de los enemigos, pero es ahí donde se han desbordados las cosas en las radios comunitarias. Yo creo que existe una necesidad, no sólo para las radios comunitarias, sino para todos los movimientos sociales en particular para el indígena, una necesidad de hacer puentes, de romper esos aislamientos de los grupos que muchas veces radicalizados se empiezan a separar de las bases y terminan por lo menos convirtiéndose, o por lo menos mucha gente los ve así, en enemigos.
Esta fuerza de las radios les quita el papel de victimas, ya no pensar en las radios comunitarias como victimas porque eso las debilita, porque eso hace que las traten con una diferencia que no corresponde, yo creo que ya son demasiado maduras para evaluarlas como realmente son, gran parte de las radios comunitarias que fracasan, no lo hacen por imposición directa del estado, por supuesto que hay muchas cuestiones indirectas que influyen, pero fracasan por falta de capacitación, porque no hay una dirección clara de las radios comunitarias, yo creo que es esta debilidad lo que hace fracasar a las radios, y ahí hay mucho trabajo por hacer, para no ser solo una bandera de lucha sino ser una fuerza actuante en todos los barrios y comunidades que llenen ese inmenso vacío  que hay en la comunicación sobre cuestiones sociales, sobre nuevas maneras de organizar el transporte, la basura, la siembra, etc.


*Eugenio Bermejillo
Antropólogo y capacitador de comunicadores. 
Ha sido coordinador de la Red de Comunicadores 
Boca de Polen desde su fundación en 2001. 
Es representante de los comunicadores indígenas 
chiapanecos ante la Comisión de Seguimiento del Congreso
 Nacional de Comunicadores Indígenas.
 Integrante del Grupo de Trabajo de Comunicación 
de la Comisión de Seguimiento del Congreso 
Nacional Indígena y fue asesor del Ejército Zapatista 
de Liberación Nacional para las mesas I, sobre Derechos
 y Cultura Indígena y II, sobre Justicia y Democracia