
A los indígenas, que cumplen sentencias de 20 y 40 años, se les responsabilizó de la masacre ocurrida el 22 de diciembre de 1997. De acuerdo con datos recabados, en la votación programada para el próximo miércoles 12 la mayoría de ministros de la Primera Sala votará por amparar a los indígenas, para que queden en libertad de inmediato.
Desde la perspectiva de los ministros, las anomalías encontradas son una muestra de los defectos que presenta el sistema de justicia. Con su decisión, la Suprema Corte pretende también establecer criterios que combatan en el futuro las irregularidades que se cometan relacionadas con la integración deficiente o amañada de las averiguaciones previas, la valoración de las pruebas obtenidas de manera ilegal, el respeto a las garantías procesales y al derecho a una adecuada defensa, así como a una justicia pronta y expedita.