lunes, 10 de diciembre de 2012

Modelo comunicacional boliviano desde la raíz de los pueblos


El comunicador Donato Ayma, en la cabina de radio Atipiri. Crédito: Franz Chávez /IPS
“Mä amuyuki, mä ch’amaki” (“Con un solo pensamiento, con una sola fuerza”, en aymara), arranca cada día su programa en radio Atipiri el exministro de Educación Donato Ayma, bajo su modelo de comunicación “desde las raíces profundas de los pueblos”. El académico e investigador aymara recreó su infancia y juventud en la frígida altiplanicie de Toledo, una aldea del occidental departamento de Oruro. Allí comenzó su carrera frente a los micrófonos, en 1969, y empezó a idear lo que denomina un Nuevo Modelo de Comunicación (Numocom) para Bolivia.
“Soy un radio apasionado”, dice muy animado en una entrevista con IPS, al relatar sus experiencias ante los micrófonos, su tránsito de siete meses en el gabinete ministerial del presidente Carlos Mesa (2003-2005), los 15 años en Radio San Gabriel y ahora en Atipiri, un medio lanzado para descubrir comunicadores en los pueblos indígenas.
Imposta la voz, habla en tono grave, repasa algunas teorías de manera formal y luego comienza a explicar los rigurosos pasos para demostrar la validez de su propuesta inspirada en los oyentes de radioemisoras indígenas, a los que se dirige cada mañana de 6:00 a 8:00 desde la emisora de amplitud modulada.
Atipiri pone en práctica desde 2006 planteamientos del Centro de Educación y Comunicación para Comunidades y Pueblos Indígenas, del que Ayma es fundador, y emite como San Gabriel desde El Alto, una ciudad de la meseta altiplánica que rodea La Paz.
En El Alto se han asentado muchos de los inmigrantes que llegaban a La Paz, ciudad sede del gobierno, desde confines rurales, casi todos indígenas, y desde aquí, paradójicamente, germinan ahora iniciativas para promover la cultura, los valores y la inserción de los habitantes de los pueblos originarios que quedaron en sus hábitats.
Ayma recuerda que el censo de población de 2001 incluyó la pregunta sobre autopertenencia a un pueblo indígena y 62 por ciento de los 8,2 millones de habitantes de entonces declararon una raíz cultural originaria. La proyección oficial actual eleva el número de habitantes a 10,6 millones.
La encuesta no solo preguntó por primera vez la adhesión voluntaria a una cultura originaria, sino que determinó que la mitad de los censados tenía una lengua materna indígena.
Con el cruce de esos dos datos y otros, un análisis del Instituto Nacional de Estadística interpretó una influencia étnicolingüística en 66 por ciento de la población.
La Constitución de 2009 declaró a Bolivia como un Estado plurinacional, con 36 grupos etnolingüistícos diferentes.
Ayma, uno de los comunicadores indígenas más reconocidos de Bolivia, explica que en la realidad rural boliviana, “la radio sigue siendo el medio más accesible y de fácil manejo”, en este país sudamericano donde conviven altas cumbres de la cordillera andina, valles, llanuras y selva amazónica.
Describe con entusiasmo escenas del trabajo agrícola de los campesinos en la desolada altiplanicie andina, cuando todavía hoy quiebran la tierra con arados tirados por bueyes, al son de las melodías de un receptor portátil.
“Las jóvenes prefieren escuchar mensajes en su lengua materna, son bilingües y por costumbre eligen escuchar música que exprese el pensamiento y la vivencia de su pueblo”, argumenta para otorgar solidez a su teoría y a su propuesta del Numocom.
En estos retratos de la vida rural, se fundamenta el modelo en que sitúa a la “radio comunitaria como instrumento de comunicación y el desarrollo”, con un componente de generación de mensajes “desde la raíz profunda de los pueblos”.
Los primeros experimentos de transmisión radial en Bolivia son atribuidos por el experto José Gramunt a los religiosos calixtinos Cerro y Descottes, en 1914.
La primera emisora que realizó transmisiones comerciales fue Radio Nacional de Bolivia, desde el 3 de marzo de 1929, mientras las emisiones en lengua aymara datan de la década de los años 60, con espacios diarios entre 5:00 y 7:00 de la mañana.
En el Numocom, el académico cambia al actor que emite el mensaje. En lugar del comunicador experimentado y formado en una universidad, su modelo reivindica el trabajo de los comunicadores que hablan su propia lengua y generan mensajes para sus comunidades.
En los radiodifusores comunitarios personifica a los intérpretes y emisores de una realidad que, en opinión de Ayma, es ignorada por los grandes periódicos y medios electrónicos.
“En las páginas de cualquier periódico latinoamericano siempre destacan las noticias de la realeza europea, sus bodas, sus embarazos. Pero no vemos noticias desde Charaña (la zona occidental fronteriza con Chile), desde los pies del Anallajchi (una montaña nevada) o desde los lugares de pastoreo de llamas (camélidos) o las zonas amazónicas”, comenta.
“En estos momentos un ganadero llega sediento tras una jornada de trabajo y nos escucha” y se queja de que su realidad no está reflejada en los medios, dominados por las propuestas uniformadoras de entretenimiento popular de las grandes trasnacionales de comunicación, aduce.
Observa con rechazo a las radios comerciales de El Alto, donde la cumbia combinada con los ritmos “tecno” y el “rap”, dominan las emisiones, y según Ayma, excluyen a la música tradicional boliviana interpretada con instrumentos de viento, de cuerda y percusión.
A diferencia de los periódicos que llegan escasamente a zonas alejadas, la radio es el medio preferido porque “es escuchada por personas analfabetas. A través de los oídos se pueden escuchar unos a otros”, razona.
Ayma evoca al comunicador boliviano y Premio MacLuhan 1983, Luis Ramiro Beltrán, por sus teorías de comunicación para el desarrollo, que dominaron las décadas de los 60 y 70 del siglo pasado.
El comunicador toma esas bases y avanza con su modelo a la difusión de otros valores como el cuidado del medio ambiente, la conservación de la “Pachamama” (madre tierra), el manejo apropiado del agua destinado a consumo humano y al riego.
Postula, además, una lucha contra el uso de productos sintéticos que una vez desechados terminan envenenando a los animales.
Completa su modelo con una adhesión a la comunicación horizontal, que sea aplicada a la organización social de las comunidades y convierta al comunicador en partícipe de la acción.
Por ejemplo, dice, mientras la comunicación vertical imponía tareas con una orden: “barre tu calle”. La comunicación horizontal compromete al emisor, que se suma a la tarea y expresa: “tenemos que barrer las calles”, explica.

Por: Franz Chávez 

jueves, 6 de diciembre de 2012

Indígenas reclaman autodeterminación comunicacional


-Comunicadores indígenas de América Latina demandaron acortar la brecha digital.

La comunicación es una estrategia fundamental para que los pueblos indígenas ejerzan un poder transformador en la construcción de imaginarios, es decir, en los valores, costumbres, prácticas y razonamientos de la sociedad actual. Ello a fin de consolidar Estados verdaderamente democráticos e interculturales que respeten la participación plena de los pueblos indígenas y generen políticas públicas orientadas al ejercicio de sus derechos.

Esta fue una de las conclusiones del Parlamento Internacional de Comunicación Indígena y Plurinacionalidad realizado en Buenos Aires del 13 al 16 de noviembre. El encuentro, convocado por la Coordinadora Latinoamericana de Cine y Comunicación de los Pueblos Indígenas CLACPI, reunió a comunicadores indígenas de Argentina, México, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana Francesa, Venezuela y Perú. Este último país fue representado a través de CHIRAPAQ Centro de Culturas Indígenas del Perú.

Los comunicadores señalaron la importancia de impulsar iniciativas de legislación en materia de comunicación indígena, como herramienta clave para lograr la participación plena y efectiva de sus pueblos en la vida política nacional de cada país. Ello implica, según indicaron, el contar con medios de comunicación comunitarios, gestionados por organizaciones y comunidades indígenas en cada país.

Al respecto, cabe destacar la experiencia de Argentina, en donde el artículo 151 de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, y su reglamentación, incorpora la posibilidad de acceso a los medios de comunicación, estableciendo que “los pueblos originarios podrán ser autorizados para la instalación y funcionamiento de servicios de comunicación audiovisual por radiodifusión sonora con amplitud modulada (AM) y modulación de frecuencia (FM) así como de radiodifusión televisiva abierta”.

En el caso específico de Perú se expresó la importancia de modificar la Ley de Radio y Televisión vigente, que considera el otorgamiento de licencias para radios comunitarias, pero que en la práctica no se promueve de manera efectiva y conlleva a una serie de trabas de orden económico y social.

A través de una declaración pública los comunicadores indígenas manifestaron también su preocupación por la persecución, hostigamiento y violencia de la que son víctimas por parte de los grupos armados, gobiernos, megaproyectos y grupos económicos transnacionales. Asimismo, demandaron el respeto a la vida de los comunicadores indígenas y el respeto por el ejercicio libre y autónomo de su labor.

Finalmente señalaron que toda legislación sobre comunicación debe reconocer el derecho a la existencia de medios de comunicación indígenas.


Fuente: Centro de Estudios Indígenas del Perú.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Presentación de comunicadores con las Autoridades municipales 2013



Comunicadores rumbo a la Segunda Cumbre Continental de Comunicación Indígena y presentación con las Autoridades Municipales de Tlahuitoltepec, del año 2013, accionando los preparativos locales para todo abya yala.
Estando presente destacados comunicadores del Congreso Nacional de Comunicación Indígena de México, Comunicadores de las diferentes regiones de Oaxaca, y la Radio Comunitaria Mixe, Jënpoj, realizado el 25 de noviembre del presente año en el marco del “Taller de reflexión del derecho internacional, nacional y local sobre el territorio, el uso, manejo, aprovechamiento y defensa del espacio aéreo de los pueblos indígenas de las regiones del estado de Oaxaca

martes, 4 de diciembre de 2012

Colombia: “Las ondas contra las balas”: las radios indígenas del Cauca

Para contextualizar el papel que cumplen los comunicadores indígenas en las radios comunitarias del Cauca, compartimos el informe y el video de una misión de Reporteros sin Fronteras elaborado este año por la corresponsal colombiana Fabiola León Posada y el documentalista italiano Simone Bruno.

Las radios comunitarias representan una garantía contra el aislamiento de las poblaciones que se encuentran atrapadas en el fuego cruzado de este interminable conflicto armado, y son estigmatizadas por ambos bandos.
Dos estaciones de radio – Voces de Nuestra Tierra de Jambaló y Nasa Estéreo en Toribío – se vieron obligadas a suspender sus actividades. La banda de la primera de ellas fue destruida, el pasado 3 de julio. Sus periodistas y locutores dieron su testimonio durante la misión llevada a cabo.
Lejos de ser víctimas “colaterales” de los beligerantes, los pueblos indígenas son blancos del combate. Las amenazas provienen, tanto de parte de un Ejército, que los tilda de “simpatizantes de la guerrilla”, como por parte de la guerrilla, que los culpa de ser “colaboradores del Estado”.
Esta situación ha deteriorado aún más con las nuevas advertencias de los grupos paramilitares, Águilas Negros y Rastrojos, quienes prometieron el pasado 28 de julio, llevar a cabo una “limpieza social” en el norte del Cauca.
Estos mercenarios del terror podrían ser los autores materiales del asesinato, en presencia de su familia, el 14 de octubre de 2010, del líder comunitario y periodista radial Rodolfo Maya Aricape, crimen que continua en la impunidad.
Reporteros sin Fronteras llama y reclama por una ayuda pública e internacional para reconstruir los medios de comunicación comunitarios afectados por los combates.
Asimismo, invoca la seguridad absoluta de los espacios de los medios comunicación y de encuentro que requieren las comunidades y el cese del fuego y la exclusión de la población civil del combate.

Fuente: Servindi 

lunes, 3 de diciembre de 2012

Finaliza el Segundo Encuentro de Comunicación Indígena en Zaachila, Oaxaca


En un espacio donde se reunieron comunicadoras y comunicadores de los Pueblos indígenas y afromexicanos  en Zachila, Oaxaca,  se reflexionó, analizó y propusieron temas pendientes del derecho a la comunicación de los pueblos indígenas de México.
El Segundo Encuentro de comunicación indígena “Comuniquemos sueños, construyamos realidades” tuvo como objetivo contribuir al desarrollo de la comunicación indígena y la libertad de expresión mediante la articulación, el análisis y la reflexión para el fortalecimiento del diálogo intercultural entre los diversos actores de la sociedad, durante los días 30 de noviembre, 01 y 02 de diciembre en el municipio Villa de Zaachila, convocado por el Ayuntamiento de Zaachila, Radio Zaachila, Ojo de agua comunicación y la Secretaría de Asuntos Indígenas.
En 2012, año Internacional de Comunicación Indígena, diferentes medios comunitarios de comunicación indígena buscaron fortalecer los procesos locales y destacaron la pluriculturalidad de los pensamientos comunales de Oaxaca, así como materializar el reconocimiento de los pueblos indígenas reconocido por la Organización de las Naciones Unidas el derecho a los medios de comunicación indígena, con una visión propia, acorde a las realidades.
En este marco, la comisión estatal organizadora,  la Comisión de Seguimiento del Congreso Nacional de Comunicación Indígena de la Segunda Cumbre Continental de comunicación Indígena del Abya Yala ha invitado a todos los comunicadores de Oaxaca para participar en tan importante cumbre a celebrarse del 7 al 13 de octubre del 2013 en la comunidad de Tlahuitoltepec Mixe.
 Fuente: Comunicaciones Abya Yala

Exigen a los “actores de la guerra” respetar la vida, el territorio y el derecho a la comunicación



El Foro Nacional de Comunicación Indígena culminó el viernes 30 en Popayán, Colombia, con la suscripción de una declaración que demanda una política pública diferencial de comunicación e información “desde los pueblos”. Se pronuncia además sobre el diálogo gobierno-guerrilla y define criterios sobre la comunicación indígena y la defensa de los territorios y la vida digna.
El documento suscrito por más de 700 participantes exigió a todos los actores de la guerra “el respeto a la vida, al territorio, al derecho internacional humanitario, en particular la garantía a la vida digna, y al ejercicio de la libertad de prensa y expresión a través de los medios de información y comunicación indígenas”.
En el actual proceso de diálogo gobierno – guerrilla el Foro solicitó “la plena garantía de que los asuntos que afectan a la población civil, en especial a los pueblos indígenas, sean tratados directamente en espacios propios de las organizaciones civiles”.
Asimismo exigió que se respeten los Planes de Vida y las propuestas alternativas de los pueblos al “proyecto de muerte”. Al respecto denunció que se busca victimizar a los indígenas para despojarlos y que se usa la política estatal, el modelo económico y el conflicto armado “para robarnos”.

Sobre la política de Comunicación
El documento suscrito por el foro solicitó una política pública diferencial entendida “en el sentido que debe respetar la construcción normativa y autónoma de los pueblos indígenas, de acuerdo con sus características territoriales, políticas, sociales y culturales, generando y garantizando los recursos especialmente para la implementación y ejecución de los procesos y medios de comunicación propios”.
De otro lado, reafirmó “el caminar de la palabra desde los pueblos y regiones con el compromiso de fortalecer los procesos comunicativos propios a nivel local, regional y nacional en la perspectiva de articular tejidos, redes y alianzas entre pueblos y procesos de comunicación indígena”.
También precisó su propósito de consolidar redes de carácter regional, nacional e internacional indígenas y con otros sectores sociales para visibilizar e impulsar acciones y campañas en defensa de los territorios y la vida, difundir las potencialidades de los pueblos indígenas, y expresarse en contra de la discriminación, la violencia y la guerra.

Segunda Cumbre Continental de Comunicación
El Foro reafirmó asimismo su compromiso de participar y contribuir al éxito de la segunda Cumbre Continental de Comunicación Indígena del Abya Yala, a realizarse en Oaxaca, México, en octubre del 2013, para fortalecer los lazos de comunicación entre todos los pueblos indígenas del continente.
De esa manera será posible construir y desarrollar una agenda común que articule y potencie nuestros esfuerzos continentales, en aras de avanzar en el ejercicio del derecho a la comunicación, como expresión de la autodeterminación de nuestros pueblos, así como de un plan de liberación de la palabra.
El documento también precisa que el documento general final conteniendo los términos y la hoja de ruta para construir una política pública, será evaluado, próximamente, con delegados de los diferentes pueblos, donde se definirán las líneas generales para exigir que el Estado garantice su aplicabilidad.
Ello se realizará a través de los espacios de concertación propios y de relación institucional que se construyen desde las regiones y procesos organizativos.
Finalmente, el pronunciamiento invoca a las comunidades indígenas, autoridades tradicionales y procesos organizativos a comprometerse y continuar asumiendo con decisión el caminar de la palabra y en ese sentido a compartir, discutir y difundir los resultados generales de este foro.

Fuente: Servindi 

viernes, 30 de noviembre de 2012

Realizan segundo Encuentro de Comunicación Indígena en la Villa de Zaachila


·        Aproximadamente 100 comunicadoras y comunicadores de los Pueblos indígenas y afromexicanos se reúnen para reflexionar diversos temas de comunicación.

En el marco del año Internacional de Comunicación Indígena -declarado por la Organización de las Naciones Unidas el 09 de agosto del 2012-, del 30 de noviembre al 2 de diciembre, se llevará a cabo en la Villa de Zaachila, el II Encuentro de comunicación indígena “Comuniquemos sueños, construyamos realidades”, impulsado por la Secretaría de Asuntos Indígenas, el Ayuntamiento de Zaachila, Radio Zaachila y Ojo de agua comunicación.
 El II Encuentro de comunicación indígena tiene como objetivo contribuir al desarrollo de la comunicación indígena y la libertad de expresión mediante la articulación, el análisis y la reflexión para fortalecer el diálogo intercultural entre los diversos actores de la sociedad.
 En esta reunión, comunicadoras y comunicadores de los 15 pueblos indígenas y afromexicanos del estado, compartirán y reflexionarán acerca del trabajo que realizan en sus comunidades y el papel de los medios de comunicación en los temas relacionados a la perspectiva de género, democratización en medios, defensa de la tierra y territorio, lenguas originarias, derecho a la comunicación y el fortalecimiento de elementos culturales identitarios.
 De la misma forma se abordarán los temas a tratar durante la “Cumbre Continental de Comunicación Indígena del Abya Yala” - que en el 2013 se realizará en Santa María Tlahuitoltepec- el cual reúne las voces originarias del continente que se unirán en un acto común de revaloración de la Madre Tierra.
 Además, habrá laboratorios de producción visual, fotográfica, periodística e internet, para fortalecer los procesos comunicación comunitaria y contribuir al desarrollo social y cultural de las comunidades indígenas.
 Cabe mencionar que entre los ponentes estarán José Gil Olmos periodista de la revista Proceso y recientemente ganador del Premio alemán de periodismo, Martha Sánchez, Coordinadora de la Alianza de Mujeres Indígenas de Centroamérica y México del Centro de Derechos Humanos de Tlachinollan, Guerrero, así como Guadalupe Blanco Representante de la Red de Mujeres de AMARC México.

Fuente: NSS Noticias

jueves, 29 de noviembre de 2012

Bolivia: Mujeres quechuas siembran derechos desde las ondas

Trifonia Tordoya, sus hijas y su nieta, durante la emisión de su último programa
IPS, 26 de noviembre, 2012.- Atispa mana atispa ñawpajman rinanchis tiyan” (“Poder sin poder, tenemos que seguir adelante”, en quechua), dijo como despedida a sus oyentes Ruth Rojas, al cerrar una serie de programas radiales sobre cultura política dirigidos a indígenas bolivianas.
Desde la pequeña cabina de radio Ecológica, en el municipio de Cliza, ubicado en uno de los valles característicos del departamento central de Cochabamba, cuatro mujeres de generaciones diferentes provocan el debate y reflexionan sobre tópicos vinculados a la política y a sus derechos.
Hablan sobre el ejercicio de la democracia, el control social, la equidad de género, la legalidad y temas similares, siempre desde su vivencia como mujeres de esta región.
Experiencias similares se repiten desde otras radios comunitarias, por los valles de esta región de la ladera oriental de la cordillera de Los Andes, eminentemente agrícola y subdividida según su altitud en valle alto, central y bajo.
Por toda Cochabamba, mujeres que no pasaron por escuelas de locución ni producción radial usan las ondas para informar y formar a otras, así como para promover cambios en sus comunidades.
Todas saben por propia experiencia que la radio es el mejor medio para llegar a las mujeres de sus comunidades, a sus hogares, donde es impensable la televisión por falta de electricidad y menos los periódicos por las distancias.
En Bolivia no hay un registro del total de radios comunitarias y sectoriales (mineras, sindicales, campesinas), porque la mayoría tienen escasa cobertura, son artesanales y operan sin licencia. Pero se estima que existen al menos 2.000 de estas radioemisoras.
Su impacto en las localidades rurales y periburbanas a las que alcanzan sus ondas es indiscutible, gracias a su programación en quechua, aymara o guaraní, las tres lenguas más habladas por los 36 grupos etnolingüísticos de Bolivia, donde más de 60 por ciento de sus 10,6 millones de personas se declaran indígenas. Hay áreas donde existen programas bilingües o trilingües.
La red comunitaria más extendida es Educación Radiofónica de Bolivia (Erbol), vinculada a la Iglesia Católica y cuya prioridad es la promoción social.
Durante 21 domingos, Trifonia Tordoya, de 63 años, dirigió un programa de dos horas en vivo y en quechua, junto con sus hijas Ruth y Tania Rojas, maestras de 25 y 30 años respectivamente, y su nieta Madeleine Pereira, de13 años.
El nombre del programa fue ya una declaración de intenciones: “Wakichikuy wasiyuj allin kawsayta tarinapaj” (“A prepararse para el buen vivir”, en quechua).
Tordoya contó en quechua a IPS en los estudios de radio Ecológica, tras concluir el último programa, que este fue fruto de su inquietud por la participación de las mujeres en la organización productiva de su comunidad.
Ella y otras lideresas participaron en el programa “Cultura política y diversidad cultural: Empoderando ciudadanía en poblaciones quechua hablantes de Perú y Bolivia”, que en este país ejecuta la organización no gubernamental Ciudadanía: Comunidad de Estudios Sociales y Acción Pública.
El objetivo del proyecto es el de recuperar sus saberes para promover un diálogo político intercultural y fortalecer una democracia de las mujeres.
Durante tres años, lideresas de 20 organizaciones comunitarias rurales de los valles de habla quechua de Cochabamba trabajaron en la construcción de sus propios conceptos y sus definiciones, a partir de su vivencia.
Finalmente, escogieron 19 elementos, entre ellos: democracia, legitimidad, legalidad, autonomía, derechos, violencia de género, exclusión, discriminación, transparencia, corrupción y justicia, explicó a IPS la coordinadora del programa, Olivia Román.
“No sabíamos qué era exclusión. Nos preguntábamos entre nosotras qué significaba esa palabra que en quechua no existe. Luego, entre todas, construimos una definición para ese concepto”, recordó Tordoya.
Ella asistió a los talleres con su nieta Madeleine, en ese entonces de 10 años, para que le tomara apuntes, porque escribe y lee con dificultad, ya que solo cursó cinco años de educación primaria. Tras ser abandonada por su marido, crió sola a sus seis hijos, gracias al cultivo de una pequeña parcela.
Ninguna definición fue fácil. “¿Género? Eso para nosotras era solo una tela. Habíamos escuchado esas palabras en español, pero no sabíamos exactamente qué querían decir. Así que debatimos y los definimos en quechua”, destacó Norah Claros, otra participante en los talleres.
Decidieron llamarlo “qhari-warmi” (hombre-mujer), porque en la cultura quechua la base es la complementariedad y paridad de los opuestos, y establecieron como su significado: “Hombres y mujeres tienen los mismos derechos, capacidades y forma de vida, eligiendo y siendo elegidos, ayudándose entre ambos en el trabajo y la vida”.
El siguiente paso fue difundir esos conceptos entre las demás mujeres y promover su ejercicio cotidiano, porque concluyeron que, por desconocimiento de su significado, no son derechos exigidos ni practicados.
Unas participantes plantearon realizar programas radiales; otras, talleres, sociodramas, cuñas radiales, entre otros. Tordoya propuso un programa radial, la iniciativa prosperó con el apoyo de Ciudadanía y decidió involucrar a sus hijas y su nieta mayor.
Las cuatro mujeres de Villa El Carmen, una comunidad campesina de Cliza, manejaron inicialmente un concepto en cada uno de los primeros 15 programas dominicales en vivo. El gran interés de la audiencia impulsó un segundo ciclo de seis.
Las cuatro dijeron a IPS que lograron su objetivo: llegar a los hogares de las comunidades del valle alto e interpelar a las autoridades locales sobre los derechos de las mujeres y el ejercicio de la democracia.
“La audiencia aumentó durante el programa, con mucha participación de la población a través de llamadas telefónicas, así que ampliamos su duración a dos horas y se hizo otro ciclo”, dijo a IPS el director y propietario de la emisora, Roger Araoz.
“Los oyentes llaman y piden que ellas continúen porque explican bien los derechos de las mujeres y hacen críticas positivas a las autoridades”, dijo. La radioemisora integra la red Erbol, llega a toda el área rural del valle alto y está ubicada en el casco urbano de Cliza, a 37 kilómetros de la capital de Cochabamba, de igual nombre.
“La señora Trifonia es conocida y respetada, participaba en otros programas o venía hasta los estudios a plantear problemas de la comunidad, por lo que cuando surgió la oportunidad del programa, le dimos el espacio sin pensar”, expresó Araoz.
Tania y Ruth Rojas coindicen en que el criterio general, no solo en su comunidad, es que las mujeres no saben pensar y no deben participar en política o ser parte de la toma de decisiones, por lo que se sorprenden de que cuatro mujeres hablen con propiedad de esos temas por los micrófonos.
Ambas agradecen a su madre haberlas involucrado en el programa, porque les permitió a ellas mismas saber que tienen derechos y aprender a ejercerlos, lo que antes no tenían claro pese a ser educadoras.
Más importante, sirvió para que muchas mujeres quechuas conozcan esos derechos y los exijan en sus hogares, en sus comunidades y en la sociedad.
Madeleine Pereira asegura que todo lo aprendido en los talleres y en el programa “lo trato de poner en práctica en la escuela y enseño a mis compañeras que tienen derechos”

Por: Jenny Cartagena T
Servindi


Colombia: Minga Radial: Tercer día del Foro Nacional de Comunicación Indígena

Para esta entrega, indígenas  comparten cómo se vive el tema del control territorial en sus comunidades, y cómo detrás de este control vienen mayores problemáticas de poder en otros ámbitos de las comunidades como la salud y la educación.
Foto: Jorge Agurto/ Servindi
El programa invita a continuar con la resistencia por la defensa de la tierra, el territorio y la vida. Esta es también una entrega especial que cuenta acerca de la Guardia Indígena inicialmente en la voz de una mujer del pueblo Totoroes. Desde la cosmovisión de los Pueblos se invita también a pensar en la Madre Tierra.

Fuente: Servindi

Radios comunitarias indígenas del Cauca, Colombia, piden ayuda tras ser blanco de ataques

Foto: CRIC
Reporteros sin Fronteras, 29 de noviembre, 2012.- Al reanudarse fuertes enfrentamientos entre Ejército y guerrilla en el departamento del Cauca, las comunidades indígenas y sus medios de comunicación se encuentran más que nunca expuestas al peligro y la censura.
Las radios comunitarias, afiliadas al Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), son las voces de los pueblos Nasa, Misak, Yanacona, Totoró, Kokonuco y algunos grupos de campesinos, y su existencia constituye una garantía esencial contra el aislamiento de las poblaciones en donde están asentadas.
Dos de estas estaciones radiales -Voces de Nuestra Tierra en Jambaló y Nasa Estéreo de Toribío–, no pueden emitir sus programas. La antena de la primera fue destruida la noche del 3 de julio de 2012 y la otra decidió parar de emitir por las balaceras registradas entre Ejército y guerrilla cerca de su sede.
Angelino Fuequia, miembro de la Asociación de Cabildos Indígenas del Cauca (ACIN) ha declarado a Reporteros sin Fronteras, que luego de la explosión de las antenas el 3 de Julio pasado, también les cortaron la electricidad en la estación radial. Las comunidades indígenas están ahora en busca de plantas eléctricas. 
“Con la perdida de señal de las emisoras coordinamos la información a través de teléfono desde el Tejido de Comunicación y el Programa de Comunicaciones del CRIC y la transmitimos por Radio Payumat [estación en Santander de Quilichao - ndlr]“, dijo a Reporteros sin Fronteras Vicente Otero, responsable del Programa de Comunicaciones del CRIC.
“Sin embargo, la torre de transmisión de esta emisora está en el cerro de Munchique, el cual es estratégico por su altura y allí hay presencia de los armados, razón por la que tuvo que salir el comunicador indígena que cuidaba la torre” agregó.
En los últimos dos años, 14 colaboradores de la red, especialmente del norte del Cauca, tuvieron que huir la región. Desde enero de 2012, 18 personas de la comunidad fueron asesinadas en el contexto del conflicto armado y la ACIN ha reportado ya cerca de 120 casos de graves violaciones a los derechos humanos.
Señaladas de ser “guerrilleras” o “aliadas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia” (FARC) por parte del Ejército y los paramilitares, las comunidades indígenas son asimismo estigmatizadas por las FARC que las ven como “vendidas al gobierno” o “traidoras de la causa revolucionaria”. Por su parte, ellas exigen que todos los actores del conflicto armado evacuen sus tierras.
Durante una visita conjunta a la región en 2010, Reporteros sin Fronteras y la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (AMARC Internacional) fueron recibidas por el CRIC. Nuestra organización reclama:
  • Una ayuda pública e internacional -en la que ella misma participará a la medida de sus posibilidades– para la reconstrucción de los medios de comunicación comunitarios que hayan sido afectados por los combates.
  • La seguridad absoluta de los espacios de los medios comunicación y de encuentro que requieren las comunidades.
  • El cesa el fuego y la exclusión de la población civil del combate.
Reporteros sin Fronteras propone también albergar y difundir desde su página Web los contenidos de interés fundamental que hayan sido censurados o no publicados y que los representantes de las radios destruidas deseen plantear. 

Fuente: Servindi

martes, 27 de noviembre de 2012

La Comunicación como derecho para la organización social y procesos colectivos


Dentro de los años que nos ha tocado asumir-vivir el ejercicio de la Comunicación de manera autónoma a través del colectivo informativo Mapuexpress y a través de lo recabado en diversos encuentros, hemos comprendido que la comunicación es un derecho humano que es fundamental y necesario para la organización y los procesos sociales en pro de derechos y justicia.
El ejercicio del derecho a la comunicación debe representar las demandas y aspiraciones de los pueblos con respecto a sus derechos colectivos. Los Derechos Colectivos Indígenas, de acuerdo a los estándares internacionales y a su carácter vinculante a los Estados, se basan en que todos los Pueblos tienen el derecho a la Libre determinación, derecho garantizado a partir de la implementación, garantía, promoción y resguardo de sus distintas conexiones.
El Ejercicio, respeto, promoción y exigibilidad de los Derechos Humanos a la Comunicación, Información y Libertad de Expresión, dentro la participación y desarrollo, son formas de llevar adelante, por una parte, procesos de autonomía indígena y por otra, la exigencia a los estados de medidas de reparación, más aún frente a temas que involucran situaciones de discriminación, censura, racismo y colonialismo informativo al interior de diversos países y se establezcan políticas de participación y de consulta cuando se fomenten legislaciones y políticas públicas internas relacionadas y estas, se hagan de buena fe, encontrando soluciones adecuadas en un ambiente de respeto mutuo y participación plena, sin exclusión y amplia representatividad, sin intervencionismos, ni manipulación y de acuerdo a los intereses y necesidades de los mismos Pueblos indígenas.
El Derecho a la comunicación está basado en una visión del libre flujo de información; un derecho interactivo, dinámico, igualitario y no discriminatorio e impulsado por las necesidades sociales en vez de intereses comerciales o políticos. Sin embargo, se aprecia en la actualidad, que políticas estatales y medios masivos y comerciales en diferentes países del continente atentan sistemáticamente contra este derecho.


En efecto, se ha constatado que estos principios y obligaciones en derecho en varios países no se están cumpliendo debidamente o bien, se han implementado de manera arbitraria y manipulada por sectores gobernantes, lo que ha causado serios quiebres y trastornos internos, como por ejemplo, en Argentina, donde luego de un importante avance a través de la Ley de medios, hoy, a causa del accionar de ciertos agentes estatales, los procesos participativos son limitados y excluyentes y existe extrema polarización.
Es importante señalar que la visión del derecho a la comunicación se basa en el reconocimiento de la dignidad y los derechos iguales e inalienables de todos los pueblos al interior de los estados, lo que está consagrado y resguardado en un marco normativo internacional sobre Derechos Humanos que se refieren a estos temas y que deben ser atendidos e implementados, entre ellos: Declaración ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, el Convenio 169 OIT, el Pacto de San José Costa Rica sobre Derecho a la comunicación y Libertad de expresión, La Declaración de Principios aprobada por la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información, la Carta de Santo Domingo, entre otros.
Considerando dichos instrumentos, más los antecedentes de criminalización y de atentados a la integridad física y síquica a comunicadores indígenas, es posible constatar que diversos Países, como Chile, están lejos de cumplir los estándares mínimos sobre los derechos a la comunicación, por el contrario, una serie de iniciativas legislativas se han impuesto, como la Ley de radios o la de TV digital, sin consideración de los derechos indígenas.
Es importante destacar que diversos referentes locales a lo largo de todo el continente y que han asumido que la comunicación es un derecho o bien, de instancias articuladoras a nivel regional como la Coordinadora Latinoamericana de Cine y Comunicación Indígena (CLACPI), vienen exigiendo a los estados el respeto, garantía, implementación del derecho a establecer propios medios de información indígenas en los propios idiomas y de acceder a todos los demás medios de información no indígenas sin discriminación.
A su vez, se viene exigiendo a los Estados que adopten medidas eficaces para asegurar que los medios de información públicos y privados reflejen debidamente la diversidad cultural indígena y asegurar plenamente la libertad de expresión.
Por estos días, a fines de noviembre, un importante Foro de Comunicación Indígena se realiza en Popayán, Colombia y como han señalado sus organizadores del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), “autoridades, comunicadores, experiencias, procesos y medios de comunicación siguen rencontrándose para compartir, conocerse y trazar una hoja de ruta que permita empezar a construir una política pública diferencial, en el marco del derecho, la reivindicación de la negación, la cosmovisión, la palabra, la cultura y la memoria histórica de los pueblos indígenas”, de esta forma, aún en plena adversidad como sucede en Colombia con respecto a situaciones humanitaria de los Pueblos indígenas a causa del conflicto armado, continúa avanzando el ejercicio del derecho a la comunicación y las exigencias a los estados para que cumplan con sus obligaciones.

Por: Alfredo Seguel 
Mapuexpress, informativo mapuche 

CLACPI preocupada por situación de Derechos Humanos de Comunicadores Indígenas



En Octubre de este año, Integrantes de la Coordinadora Latinoamericana de Cine-Vídeo y Comunicación Indígena, (CLACPI) junto a referentes de más de 10 países, expusieron su preocupación con respecto a los graves hechos de violencia, crímenes genocidas y demás delitos de lesa humanidad que continúan ocurriendo constantemente en Colombia en medio del denominado conflicto armado y que afectan a innumerables comunidades y familias indígenas, afrodescendiente y campesinos.
“Las masacres que se vienen cometiendo en el marco de una cultura de violencia, incluye una larga lista de muertos a causa del conflicto armado entre el estado colombiano y su ejército, paramilitares y la guerrilla sindicada como las Farc y el ELN”, acompañada de diversos informes y documentos que también expuso sobre la situación grave en Derechos Humanos que se vive en Guatemala, Honduras, Perú, Argentina y Chile, entre otros.
CLACPI nuevamente hace un llamado de alerta por lo que enfrentan los comunicadores indígenas del CAUCA, haciendo eco a los informes que el Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) ha expuesto ante la relatoría de libertad de expresión de la OEA, donde además ha solicitado una audiencia con dicha instancia.
CLACPI, apoya las gestiones del CRIC, que hoy ha incorporado ante instancias internacionales de Derechos Humanos, como las relatorías de libertad de expresión de la ONU y OEA y el relator de Pueblos Indígenas de las Naciones Unidas, la situación de comunicadores y muy especialmente lo que vive el comunicador del Pueblo Nasa, integrante de del tejido de comunicación indígenas de la ACIN (Norte del Cauca) y director de la radio Payumat quien ha sido objeto de amenazas de muerte.
Cabe mencionar que el año pasado, en septiembre, Abel tuvo la pérdida de su hija, Maryi Vanessa Coicué quien con tan solo 11 años fue víctima del desquiciamiento y de un acto criminal quienes lanzaron una bomba al interior de su casa resultando además 5 personas heridas de su grupo familiar. Hoy, este comunicador se encuentra amenazado de muerte, por lo que se pide a los organismos internacionales de Derechos Humanos intervenir para la protección de este integrante del Pueblo Nasa.
Asimismo, CLACPI hace un llamado al estado colombiano y a los grupos bélicos denominado “Guerrilla” a asumir con consecuencia sus actuares en el circuito internacional donde se refieren a procesos de paz, sin embargo, queda demostrado que en la realidad continúan las masacres, los asesinatos y las amenazas. Piden respetar la integridad de personas inocentes y poner fin a tanta maldad y desprecio por la vida. 

Fuente: Mapuexpress
informativo Mapuche 

Inicia el Foro de Comunicación Indígena en Popayán



Con la asistencia de centenares de comunicadores indígenas e interculturales se inicia hoy en Popayán, capital del Cauca, en Colombia, el Foro Nacional de Comunicación Indígena. El evento elaborará lineamientos orientados a la construcción de una política pública diferencial para los pueblos indígenas.
 Alrededor de cuatrocientos guardias indígenas reciben a los participantes al evento que se desarrollará hasta el viernes 30 de noviembre en los ambientes de la Universidad Autónoma Indígena Intercultural (UAIIN), ubicada en el Barrio La Aldea, al norte de Popayán.
A pesar de ser un evento regional y nacional a él concurren algunos invitados de otros países como Sally Burch (ALAI, Ecuador); Jorge Agurto (Servindi, Perú); Gunarhie O´Sullivan (CO-OP Radio, Canadá); Mónica Charole (Instituto del Aborigen Chaqueño, Argentina) y Wilma Aliaga (CAIB, CSCIB, Bolivia).
Asimismo, Humberto Claros (CSUTCB, Bolivia); Ana Martina Rivas (Red Prometheus, EEUU.); Braulio Vásquez (Radio Jenpo, México); Angel Caiza (Ecuarunari, Ecuador y Dina Apaza (ALER, Perú), entre otros.
El evento es organizado por las autoridades tradicionales y los comunicadores y comunicadoras del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y la Asociación de Medios de Comunicación Indígenas de Colombia (Red-AMCIC).
Cuenta con el auspicio de Redprodepaz, el Ministerio de Cultura, la Gobernación del Cauca y el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones. Asimismo, de las entidades de cooperación solidaria GIZ de Alemania y AECID de España.

                                                                                                       Programa

Lunes 26. Luego de la inauguración del foro el primer día el evento dedicará espacio al intercambio de experiencias de comunicación y articulación entre los procesos de comunicación en Colombia. Asimismo, se abrirán espacios de trabajo por regiones, pueblos y departamentos y por la noche se realizará una muestra de cine indígena.
Martes 27. Por la mañana se realizará una mesa redonda para identificar compromisos y acciones comunicativas en red en cada uno de los territorios indígenas. Por la tarde se presentará el Foro Nacional y sus objetivos.
En la noche se efectuará una minga comunicativa alrededor del fogón en la que participarán personas mayores del pueblo indígena e invitados Hollman Morris, director del Canal Capital de Bogotá; la cineasta y documentalista Martha Rodríguez; el investigador Alfonso Gumucio; lo Monica Charole del Instituto del Aborigen Chaqueño y Ada Quilcué, del CRIC.
Miércoles 28. Por la mañana se realizarán dos paneles. El primero sobre la comunicación en la realidad de los territorios indígenas, y el segundo: La comunicación indígena como alternativa frente a la mercantilización de la palabra. Por la tarde se realizarán mesas de trabajo con expositores de Colombia y otros países.
Jueves 29. Continuará el foro con el panel 3: El caminar de la comunicación en el territorio, y el panel 4: Hacia una política diferencial de comunicación e información. Por la tarde proseguirán las mesas de trabajo.
Viernes 30. Por la mañana la Comisión Continental del Abya Yala desarrollará una mesa redonda donde abordará el tema: ¿Cómo está el continente? ¿Qué proponemos? Por la tarde tendrá lugar la plenaria final, cierre del foro y clausura del evento con grupos culturales y musicales del Cauca y Colombia.

martes, 20 de noviembre de 2012

Debatieron en Buenos Aires sobre el Derecho a la Comunicación Indígena


Deben "digitalizar" a las comunidades

El llamado ‘apagón analógico’, que iniciará en algunas ciudades del país el próximo año, podría dejar fuera de los medios de comunicación a las comunidades indígenas; con una grave pérdida de su cultura a través de la expresión audiovisual. Esto si no se les incluye con una política de gobierno en la llamada conversión digital.Así lo señaló José Luis Reza, director del Centro Internacional en Artes y Ciencias Cinematográficas, y del Festival Internacional de Cine y Video Indígena ‘Mirando desde nuestra Raíz’. En la actualidad la expresión indígena de por sí no ha logrado entrar en la televisión; pero con la conversión digital podría ser peor, aseguró.“Si ahora no hemos podido entrar a la televisión se nos viene encima otra catástrofe: el apagón. Por lo menos ahora en el país hay radiodifusoras comunitarias. Con esta nueva convergencia van a estar fuera del aire”, dijo.Agregó que solucionar este problema no se trata sólo de una readaptación a la tecnología, por la que las comunidades van a luchar, sino que, dijo, el problema es que los nuevos sistemas digitalizados van a estar ahora también en manos de los oligopolios. “Es decir otra vez Televisa, TV Azteca y Slim van a tener el poderío, y todavía ampliado, para que ellos sigan mediatizando y nos sigan robando la consciencia”, enfatizó.El especialista abogó porque el tema sea discutido en distintos foros. El Gobierno federal, señaló, debe destinar fondos no sólo para equipar a las comunidades en las nuevas tecnologías, sino además desarrollar una política global que incluya la capacitación para usarlas


Por: Fredy Ruiz
El Mundo de Córdoba 

viernes, 16 de noviembre de 2012

SONOMIRA, proyectos de comunicación indígena


EL CINE INDÍGENA


En las últimas décadas el cine se ha convertido en un poderoso instrumento de denuncia y afirmación de identidad para los pueblos indígenas. Esta opción no es nueva, ni única, pues tenemos los ejemplos cinematográficos de los países que atravesaron por momentos revolucionarios, en donde el cine se convirtió en un instrumento político de cohesión y construcción de proyectos colectivos.
Pero en nuestro país esta experiencia es inédita, pues lo indígena, al ser asumido como extraño y diferente dentro de los imaginarios sociales, quedó enmarcado dentro del documental, preponderantemente de corte antropológico y anteriormente, dentro de una poética que miraba al ser indígena desde la orilla de la “modernidad”, como fue el caso del cine indigenista y de denuncia.
A nivel mundial el cine indígena se encuentra en esta encrucijada, lo cual ha llevado muchas veces a centrarse en el fondo del discurso cinematográfico que en el lenguaje mismo, en la arquitectura de la forma, motivo por el cual muchas veces se le niega calidad estética propia o una obra de autor. Nada más alejado de la realidad. El cine indígena es un cine de planteamiento, de propuesta de cuestionamiento y su economía estética está al servicio de ello, convirtiéndose por esa misma razón en su estética, una estética de la transgresión.
Esta transgresión es la inconformidad ante nuestra situación, ante los atropellos y negación de existencia y aporte, las imágenes crudas y sin ningún tratamiento a las cuales muchas veces se apelan, corresponde a la cruda realidad de nuestros pueblos. La casi ausencia de ficción, obedece a una realidad que supera cualquier thriller o drama existencial, cualquier corte en nuestra realidad nos muestra las inequidades y brechas sociales y también, la magia de nuestros actos, el halito de la naturaleza en un toma sostenida sobre el paisaje, en la hierba, el amanecer o en la mirada y sonrisa de un niño. El cine indígena es en consecuencia poesía del dolor y poesía de la vida.
Esta dualidad y complementariedad, al mismo tiempo, forman parte de nuestro lenguaje fílmico, de tal manera que no es extraño que frente a imágenes de violencia, también se muestre las celebraciones colectivas con sus alegrías, con nuestros dilemas, mostrando las múltiples facetas de nuestro ser.
El cine indígena es imagen colectiva y no es por carencia de personalidad individual, de personajes descollantes o sui generis, que los hay, a los cuales nos tiene acostumbrados otros lenguajes fílmicos, sino por responder a demandas colectivas, a la necesidad de hablar para y por nosotros, utilizando el plural en la construcción de nuestras narrativas. En este punto el idioma viene ocupando cada vez mayor presencia, a diferencia de hace pocos años, en donde el lenguaje casi configuraba la insularidad del cine indígena, hoy en día contribuye a fortalecer su identidad estética.
Así mismo, el cine indígena viene a representar la voz de los pueblos indígenas al partir de nuestra problemática, vivencias y formas de ver el mundo, esa es su identidad y razón de ser. ¿Se puede hablar de cine indígena desvinculándolo de estos elementos? Pues por ahora no.
Otrora sombras en el celuloide, como fantasmas de un pasado que se negaba a desaparecer y al que había que capturar de alguna manera, hoy los indígenas hemos pasado al otro lado de la realidad cinematográfica, gestando nuestros propios proyectos cinematográficos, mostrando nuestra cotidianidad, retratando nuestro espíritu, en otras palabras, siendo nosotros y nosotras quienes contamos nuestras historias. Historias colectivas, historias de vida, historias para la vida.


Por: Newton Mori / CHIRAPAQ.

jueves, 15 de noviembre de 2012

SE REALIZA LA SEGUNDA MUESTRA DE VÍDEO INDÍGENA 2012 "SONIDOS Y COLORES"

Del 14 al 16 de noviembre, la Ciudad de Córdoba, Veracruz, es sede de la Segunda Muestra de Vídeo Indígena 2012 "Sonidos y Colores".
Se exhiben 24 vídeos que forman parte de la selección que fueron elegidos para mostrar la visión en torno a temas culturales, históricos, justicia, migración, cosmovisión indígena, rituales y tradiciones de diez pueblos indígenas de México, entre los que se encuentran el pueblo: maya, kiliwa, kumiai, mazahua, zoque, otomí, apoteco, teneek, popoluca, y náhuatl.
La entrada es libre, en el Centro Cultural La Capilla.